BODA EN LA CASA DE LA CAMPANA

Ser fotógrafo de boda en  La Casa de la Camapana de Cieza nos regala momentos tan especiales como el que vivimos con Macarena y Víctor .

El sol de mayo brillaba con fuerza esa mañana en la Finca de la Casa de la Campana, en Cieza, Murcia. Todo apuntaba a que sería una jornada perfecta, y lo fue. Pero no por el cielo azul ni por el paisaje imponente, sino por la emoción que se respiraba en cada rincón, en cada mirada, en cada gesto. Como fotógrafos de boda en la Finca de la Casa de la Campana, no podemos imaginar un escenario más auténtico para una historia tan bonita como la de Macarena y Víctor.

Ella, guapísima y elegante, vestía un diseño de Ramón Herrerías que parecía flotar entre los naranjos y buganvillas de la finca. Él, impecable con un traje verde de Suit Supply, con esa mezcla de estilo relajado y clase absoluta. Desde el primer clic de cámara supimos que estábamos frente a una pareja especial, de esas que no posan, sino que viven. Y eso, para nosotros, lo es todo.

La ceremonia fue íntima, emocionante, cargada de detalles pensados con mimo. La decoración floral, obra del equipo de Creativa, hablaba por sí sola: una mezcla armoniosa entre elegancia silvestre y carácter mediterráneo. El ambiente era familiar, cálido, con ese punto de magia que solo sucede cuando el amor se celebra sin pretensiones, con alma. 

Y entonces, cuando ya nadie lo esperaba, llegó la lluvia. Justo al empezar el banquete, una lluvia suave, casi simbólica. Lejos de estropear nada, fue como un guiño del cielo. La carpa instalada para la ocasión nos cobijó a todos y permitió que todo siguiera con normalidad, pero con ese aire fresco que trajo la lluvia, el ambiente se volvió aún más especial. Refrescó el calor, pero también intensificó las emociones. Como si la naturaleza quisiera participar del brindis, de los abrazos, de las risas.

Después vino la fiesta. Y qué fiesta. De esas que no se olvidan. Donde no hay poses, solo movimiento, conexión, alegría pura. Donde los amigos bailan con los padres, los novios se mezclan entre todos y la pista no se vacía ni un segundo. Como fotógrafos de bodas en Murcia, siempre buscamos captar la esencia real de una boda, pero aquí fue fácil: todo lo que sucedía era genuino, sin artificios, lleno de vida.

Macarena y Víctor no solo celebraron su amor, lo compartieron con todos los que los rodeaban. Lo bailaron. Lo gritaron. Lo hicieron eterno. Y nosotros tuvimos el privilegio de documentarlo todo, de convertirlo en recuerdos que perdurarán para siempre.

Trabajar en la Finca de la Casa de la Campana siempre es un placer, pero en bodas como esta, se convierte en un lujo emocional. Es un lugar con alma, con historia, con rincones que parecen sacados de un sueño. Si estás buscando fotógrafos de boda en Murcia que sepan captar con sensibilidad, estilo y verdad cada instante de tu día, en Doble Ele Studio estaremos encantados de acompañarte.

TEN FÉ, CONFIA EN MÍ, Y MAÑANA LO ARREGLAMOS.